martes, abril 01, 2008

"La soledad sonora"


Palimpsesto es un concepto que habita con frecuencia en la música actual. Se trata de escribir sobre el mismo material donde ya se escribió. Así llegaron a nuestras manos los textos de la antigüedad: Aristóteles, Platón y algunos más (muchos más, en realidad).

La idea es sencilla: reescribir es volver, caminar sobre algo andado en otra dirección, enfrentar unos alfabetos con otros, gramáticas que se fusionan y que ofrecen algo nuevo, un producto distinto, atractivo. Es como poner un oído en la autoridad de los grandes y el otro en la vía para saber cuánto tardará el tren en llegar.

Así dice el cap. LXVI del Quijote: "Que trata de lo que verá el que lo leyere o lo oirá el que lo escuchare leer". Compositores como Sánchez Verdú o Fernández Guerra van en esa línea. Saben que detrás del pasado hay sinfonías sin transcribir: en los frescos de la Capilla Sixtina, en el infierno de Dante por Signorelli, en el Bosco, en Brueghel...

Hay música en todas esas obras, y la iconografia casi invita a confeccionar la plantilla orquestal: trompetas, arpas, violines...

¿En qué siglo bajó Dante al infierno? ¿Dónde están los jardines del Bosco? ¿cuál fue el primer acorde la primavera de Botticelli? Tabula rasa para nuestros creadores. Audite, audite...

1 comentario:

Anónimo dijo...
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